Ofrendas y Diezmos

«Al César lo que es del César y a Andrés lo que es de Andrés».

Bendito seas con toda bendición al entregar parte del fruto de tu trabajo al único Dios que vive y reina para siempre.

«Dios ama al dador alegre».
2 Corintios 9:7

Un verdadero hijo de Dios sabe agradecer al Creador por todas las bendiciones otorgadas y no anda de sinvergüenza quedándose con dinero que no le pertenece. Las personas decentes, que aman a Dios por sobre todas las cosas, deben aportar mínimo el 10% de sus ingresos mensuales (incluyendo rentas y pensiones). No cumplir esta obligación mínima representa una de las mayores ofensas para con Dios, pues no pagarle el diezmo que le pertenece por Ley divina, es robarle al Señor.

¿De verdad estás dispuesto a robarle al que te dio la vida y la salvación?

Personas que no pagan su diezmo:

  • Homosexuales y marimachas.
  • Ateos.
  • Otakus.
  • Prostitutas y mujeres de vida fácil.
  • Comunistas.
  • Filisteos.
  • Seguidores de falsos dioses.